Solo el 3% de los jóvenes
que estudian Formación Profesional lo hacen por esta vía, que ofrece prácticas
pagadas en la empresa.
Es la gran desconocida del
sistema educativo e incluso por parte de sus propios actores implicados: muchas
empresas, instituciones, administraciones, jóvenes y padres todavía no saben de
su existencia. Mientras la FP Dual está implantada en Europa como una
alternativa más para lograr un desarrollo profesional y una situación laboral
estable —y por cierto, con gran éxito en países como Alemania y Austria—, en
España se encuentra en un estado embrionario. Aún así, desde que en 2012 el
Real Decreto 1529 estableciera las bases de esta modalidad de la FP, no ha
dejado de crecer el número de alumnos, centros educativos y empresas que año
tras año deciden adherirse a este tipo de enseñanza que abre una vía para
acercar las aulas a las empresas. Un asunto que no es menor en un país que
lidera el paro juvenil en Europa y en el que las compañías advierten de la
existencia de una gran brecha entre sus necesidades y las capacidades que están
adquiriendo los jóvenes estudiantes.
Los datos del Ministerio de
Educación constatan un lento despegue de la FP Dual. Desde 2012 se ha triplicado
el número de jóvenes que estudia esta modalidad: de 4.292 se ha pasado a 15.304
en el curso 2015/2016. También el número de institutos que ofrece esta
alternativa se ha cuadruplicado: de 173 a 789. Y el número de empresas que
participan en este tipo de proyectos se ha disparado: de 517 a 5.665 entidades.
Las lagunas legislativas,
las variables que introducen las autonomías y su difícil encaje en las pymes
frenan el desarrollo del modelo
No obstante, todavía nos
encontramos en los albores de un modelo que está muy lejos de los niveles
europeos. Hoy día solo un 3% de los alumnos matriculados en FP eligen la opción
Dual, mientras que ese porcentaje se eleva al 60% en Alemania. En países como
Austria, Dinamarca, los Países Bajos y Suiza entre el 40 y 70% de los jóvenes
optan por esta vía.
¿Por qué esta opción es tan
desconocida en España? ¿En qué consiste? ¿Cuáles son sus ventajas? La FP Dual
es una modalidad que combina la formación teórica en un instituto y la práctica
remunerada en una empresa. Se plantea como una herramienta para combatir el
desempleo juvenil, que en nuestro país sufre una de las tasas más elevadas de
Europa. El 46,5% de menores de 25 años está sin trabajo, según datos de la EPA.
Y la experiencia de los alemanes, austríacos, suizos... acredita que la mayor
parte de los jóvenes que estudian estas enseñanzas encuentran trabajo en la
compañía donde han realizado las prácticas o en otras del sector.
Aparentemente resulta una
opción muy atractiva, y sin embargo parece no despegar en España. «Hay que
ponerla en valor», pide María Tosca, subdirectora de Competitividad de la
Cámara de Comercio de España. «Existen muchas trabas culturales. La Formación
Profesional siempre ha estado mal vista en España», comenta.
Pero también existen otros
obstáculos que impiden impulsar esta enseñanza, como se reflejó en el II Foro
Alianza para la FP Dual, celebrado esta semana en Madrid. La Alianza nació el
pasado año con la intención de crear una red de empresas, centros educativos e
instituciones comprometidas con el desarrollo de estos estudios. Está impulsada
por la Fundación Bertelsmann, la Fundación Princesa de Gerona, la patronal CEOE
y la Cámara de Comercio de España. Y ya cuenta con 270 compañías
adheridas.Ahora se ha abierto el proceso de adhesión para los centros
educativos. La red busca divulgar la FP Dual, cuenta con asesores técnicos para
las empresas y los institutos, quiere hacerla llegar a las pymes... Pero quizá
una de sus funciones más importantes sea la labor que están realizando diez
grupos de trabajo constituidos para analizar la situación de la FP Dual en
nuestro país, identificar sus problemas y ofrecer propuestas para conseguir que
estos estudios alcancen la excelencia.
Frenos a la formación
Después de un año de trabajo
ya se han detectado algunas de las barreras que impiden el impulso de la FP
Dual. «Existe una tremenda inseguridad jurídica», explica Juan Carlos Tejeda,
director de formación de la CEOE, que lidera el grupo de trabajo sobre
propuestas de regulación. «El Real Decreto de 2012 por el que se sientan las
bases de esta enseñanza deja muchas lagunas. Falta toda la reglamentación. Aún
hay que definir los contenidos curriculares de la empresa y del centro
educativo; la formación y cualificación de los tutores; qué parte de la
formación corresponde a la compañía y cuál al instituto; incluso cómo se
distribuyen las horas en el aula y en la empresa; qué requisitos deben cumplir
los centros y las empresas para impartir esta enseñanza, ya que algunos no estarán
capacitados...», explica.
Por no hablar de que al
estar transferidas las competencias de Educación, cada comunidad autónoma
desarrolla un modelo de FP Dual. «Existen 17 modelos diferentes», asegura Luis
Miguel García, líder del grupo de trabajo de centros educativos de la Alianza y
director de Recursos Humanos de Nestlé. Lo ilustra con un ejemplo: «A la
Comunidad de Madrid le sobran empresas para hacer prácticas. Tiene un currículo
más rígido con un número de horas presenciales que no se puede alterar. Una vez
que se cumplan las horas presenciales ya se pueden hacer las prácticas en la
empresa, pero no antes. A otras comunidades les faltan empresas y los centros
son más flexibles para hacer las prácticas. Unas regiones son muy activas y
otras cero». Las diferencias entre unos territorios y otros pueden llegar
incluso a que las prácticas se remuneren o no, según indica María Tosca, de la
Cámara de Comercio de España. De ahí que la mayor parte de las compañías y
centros soliciten la creación urgente de un modelo de FP Dual estándar para
todo el país.
«El contrato para la formación y aprendizaje no da
respuesta a las necesidades reales de la empresa y el alumno»
Uno de los escollos para las
empresas es el contrato de formación y aprendizaje que exige el Real Decreto
para regular las prácticas del alumno en la compañía. «Si bien es un contrato
hiperbonificado —dice Tejeda—, también es muy rígido y no da respuesta a las
necesidades reales de la empresa ni del aprendiz. Por ejemplo, para que el
alumno tenga acceso a este contrato no debe tener una cualificación reconocida.
Por tanto, a un joven que tiene la FP de grado medio no se le podría realizar
este contrato si hace una FP Dual de grado superior. Además, el Real Decreto
establece que la retribución no sea inferior al salario mínimo interprofesional
en proporción al tiempo de trabajo efectivo. Por tanto, se considera a un joven
que está aprendiendo igual que a un trabajador experto».
Centros educativos
A la hora de impartir la
formación también surgen problemas. Hay empresas que no están capacitadas y
centros educativos que tampoco. «Uno de los obstáculos es que los centros
tienen que adaptar su capacidad formativa a un curriculum que algunas empresas
no pueden llevar a cabo. El centro da unos contenidos transversales y tiene
previstos unos contenidos prácticos que se intentan reproducir en la empresa,
pero no todos las compañías pueden dar todo el contenido curricular. Por
ejemplo, un alumno que se quiere formar en el sector textil necesita aprender
sobre hilatura, estampación, confección, corte... Pero hay empresas que solo
ofrecen estampación, otras solo corte y confección...», cuenta Luis Miguel
García.
Por eso, muchos centros
tienen que compensar lo que los alumnos no pueden hacer en la empresa, y a
algunos les resulta imposible. Otros no encuentran compañías para realizar los
convenios de prácticas, o las que encuentran están situadas a 30 o 40
kilómetros de distancia... A estas alturas, falta por definir el papel del
tutor e instructor en la empresa, que ayudan al aprendiz. Son trabajadores de
la propia compañía que además de sus tareas habituales van a dedicarse a
supervisar y enseñar a los aprendices, se tienen que coordinar y reunirse con
el centro educativo, etc... «Muchas pymes no se pueden permitir que sus
trabajadores dediquen tanto tiempo a esto», señala García.
Confianza de las empresas
Otro debate se centra en
saber hasta dónde adaptar el currículo a las necesidades de una empresa en
concreto o hacerlo enfocándolo al sector, como explica Guillem Salvans, senior
project manager de la Fundación Bertelsmann y coordinador de la Alianza por la
FP Dual. «Los alemanes —explica— tienen tendencia a dar una formación muy
adaptada a la empresa donde se realizan las prácticas y los suizos forman más
para trabajar en el sector. Las empresas alemanes contratan a dos tercios de
los jóvenes que han formado y los suizos a un tercio. Al resto los contratan
otras compañías. Ambos modelos funcionan». El éxito radica en que todas las
empresas confían en la buena formación que han recibido los aprendices.
«La empresa crea una cantera
de profesionales y a largo plazo recupera todo lo que ha invertido en el
alumno»
Reduce el desempleo juvenil,
aumenta la competitividad de un país, la formación en la empresa garantiza el
acceso a una tecnología punta de la que no disponen los institutos, ayuda a
madurar a los alumnos al incorporase a un entorno laboral... Son ventajas que
esgrimen los impulsores de la FP Dual. «La empresa crea una cantera de
profesionales y a largo plazo recupera todo lo que ha invertido en el alumno»,
afirma Salvans. De hecho, un estudio realizado por la Alianza sobre «Las
empresas y la FP Dual en España» revela que el 87% de las compañías
entrevistadas (unas cien) ven esta modalidad como una vía para formar una
cantera de personal con cualificación específica y que encaje en la cultura de
la empresa. Un 70% de ellas están dispuestas a contratar a los aprendices. En
definitiva, podría ser un bálsamo para el desempleo juvenil, pero su fórmula en
España aún esta por definir.
Grupo Bosch: una experiencia internacional
Un entorno internacional,
conocer un segundo idioma a nivel operativo y su cultura, formación
teórico-práctica de primer nivel... Estas son algunas de las ventajas que José
López San Román, director de Recursos Humanos del Grupo Bosch para España y
Portugal, mencionó cuando presentó esta semana en Madrid el programa de FP Dual
que esta compañía está llevando a cabo con jóvenes españoles en Alemania. Un
proyecto innovador que comienza este año su segunda convocatoria: Bosch oferta
50 plazas para jóvenes de 18 y 24 años con estudios mínimos de ESO, FP o
equivalente. La formación se realizará en puestos técnicos como mecánica
industrial, mecatrónica industrial, mecánica de fundición y mecánica de planta
(construcción y mantenimiento). Durará tres años y medio y será remunerada
según las condiciones alemanas. Este otoño los alumnos se entrenarán en un
curso intensivo de alemán en España y una práctica de tres meses de duración en
Alemania. Después seguirán su FP Dual en una planta de esta internacional en el
país germano. A San Román no le cabe duda de las «infinitas posibilidades de
encontrar empleo» que ofrece este programa. Bosch también ayuda a los
aprendices con asistentes profesionales y supervisión desde un plano social y
educativo.
Lidl España: creación de perfiles especializados
Desde hace 15 años Lidl
impulsa un programa de estudios duales en España de tres años de duración en el
ámbito de la administración y dirección de empresas. Las prácticas remuneradas
se realizan en diferentes áreas de la compañía. Desde 2012 Lidl ha ampliado su
oferta a la FP Dual con el objetivo de crear perfiles especializados y ofrece
diferentes programas: técnico en actividades comerciales, administración y
finanzas y marketing y publicidad. Esta formación dura dos años, tanto en grado
medio como superior, y forma a profesionales cualificados para las tiendas,
centros logísticos y oficinas de la compañía. Desde esta empresa aseguran que
«los participantes en estos programas pueden posicionarse en el mercado laboral
con una diferenciación respecto a otros jóvenes. La previsión es que al
finalizar los estudios con éxito pasen a formar parte de nuestro equipo».
La FP Dual de Lidl se ha
venido desarrollando en Cataluña y la Comunidad de Madrid, y desde este año
también en Baleares y Andalucía. La compañía incluso prevé invertir un millón
de euros en ello, el doble que hace dos cursos.
Durante todo el programa los
estudiantes cuentan con el acompañamiento y seguimiento de una tutor, que les
sirve de apoyo.
SEAT/Grupo Volkswagen: Una escuela pionera
Quizá Seat cuente con la
escuela de aprendices más antigua de España. Fundada en 1957 en Barcelona, por
ella ya han pasado 2.600 alumnos desde su creación, de los cuales un 90% se han
incorporado como empleados a la compañía. Incluso el 11% de sus directivos
proviene de la Escuela. Imparte tres ciclos formativos de grado medio en las
especialidades de Mecanizado, Mantenimiento electromecánico y Electromecánica
de vehículos. Acoge entre 60 y 75 alumnos nuevos cada año que son seleccionados
entre unos 800 candidatos que se presentan al proceso. Esta marca también
cuenta con la Volkswagen Academy de Pamplona.La titulación es reconocida por el
sistema educativo español y la Cámara de Comercio Alemana en España, «con el
consiguiente aumento de la empleabilidad», asegura Ramón Paredes,
vicepresidente de Relaciones Gubernamentales e Institucionales de Seat y del
Grupo Volkswagen en España. «La FPDual —dice— supone una mejora sustancial de
la calidad de la formación de nuestros jóvenes y permite obtener un nivel mucho
más completo para la aplicación de sus conocimientos en su lugar de trabajo de
manera más rápida y efectiva, incidiendo notablemente en la productividad de la
organización».
Volvo Car España : Comienza un programa propio
Volvo Car España inicia este
año su primera aventura en la FP Dual con un programa para conseguir el título
de técnico superior en el sector de la automoción. Además del aprendizaje
durante un año en un instituto, los alumnos recibirán un plan desarrollado por
la marca de origen sueco que «impulsa técnicas superiores en automoción,
tendrán a su alcance tecnología punta, podrán hacer el diagnóstico de un coche
y conocerán los valores de la compañía», como explica Javier Lirón, responsable
de Formación y Desarrollo de Volvo.
Pasado ese año, realizarán
la formación práctica en alguno de los concesionarios o talleres colaboradores
de la red del Grupo Volvo. Son 21 plazas para Andalucía, Cataluña y la
Comunidad de Madrid.
Precisamente, la apuesta de
esta compañía por la FP Dual es sobre todo comenzar a formar una cantera de
profesionales que podrán incorporarse a su red de concesionarios en un futuro.
«Tenemos que intentar tener a los mejores profesionales trabajando con
nosotros, por eso durante su formación se les ofrece un valor añadido como son
los conocimientos de Volvo y sus valores de marca», añade Lirón.