La mitad de las
localidades se encuentran en riesgo muy alto, alto o moderado de quedar
totalmente despobladas a medio y largo plazo.
El presidente de la
Comisión de Despoblación de la FEMP reclama «políticas de Estado urgentes» ante
la sangría demográfica
La mitad de los municipios españoles se encuentran ya en
riesgo de extinción. En estos momentos, subsisten con menos de mil habitantes
4.995 de los 8.125 municipios que tiene España en total. La inmensa mayoría de
esas casi cinco mil localidades sufren el continuo envejecimiento de su censo
demográfico y un mínimo o nulo relevo generacional, con escasas o nulas cifras
de natalidad.
Este es uno de los datos que aporta el informe «Población y
despoblación en España 2016», que ha sido presentado a la Comisión de
Despoblación de la FEMP por su presidente, Juan Antonio Sánchez Quero, que
también es presidente de la Diputación de Zaragoza, en una reunión celebrada
este mediodía a la que han asistido también, en calidad de invitados, varios
miembros de la Comisión de Diputaciones, entre ellos su presidente y de la
Diputación de Jaén, Francisco Reyes. El estudio ha sido realizado a partir del
análisis del último padrón de habitantes publicado hace escasas semanas por el
INE, en el que se detallan las cifras de población de todos y cada uno de los
municipios españoles.
Menos de 500
habitantes
El informe presentado por Sánchez Quero alerta de que sigue
agravándose la crisis demográfica y de que sus efectos comprometen el futuro de
cada vez más municipios españoles. Así, ya son 2.652 las localidades que
subsisten con censos de menos de 500 habitantes. De ellas, 1.286 (casi dos de
cada diez municipios españoles) ni siquiera pasan de los cien vecinos
empadronados: son 48 más que en 2015 y 358 municipios más de los que había en
el año 2000 con menos de 100 empadronados.
España ha perdido 67.374 habitantes en los últimos dos años,
una sangría que se ha concentrado sobre todo en las áreas rurales
Entre 2015 y 2016, España ha perdido 67.374 habitantes, pero
esa sangría poblacional se ha concentrado mayoritariamente en las áreas
rurales, ya que la suma de población de las capitales de provincia españolas ha
ganado unos 14.000 habitantes durante el último año.
«De las palabras a la
acción»
Con los datos que aporta este informe, el presidente de la
Comisión de Despoblación de la FEMP ha reclamado «la aplicación de urgentes
políticas de Estado» ante el severo retroceso demográfico que se está
produciendo y la amenaza que supone para las áreas rurales, algo que ha
calificado como «un problema sociopolítico de primer orden» para España.
Sánchez Quero ha subrayado que la crisis demográfica está
azotando con especial crudeza a los pequeños y medianos municipios, lo que hace
que cada vez más localidades se encuentren «tras la línea roja del peligro de
extinción».
Por ello, considera «imprescindible la adopción inmediata de
medidas concretas para sostener e incrementar la población de los pequeños y
medianos municipios, no solo por una cuestión de interés social sino también
económico».
En concreto, ha apelado a la «coordinación de un plan
nacional contra la despoblación entre Estado, autonomías y FEMP, que se elabore
y desarrolle con la voz protagonista de las Diputaciones y de los
Ayuntamientos, «que conocen de primera mano la crisis demográfica y son, en su
día a día, la "punta de lanza" en la lucha contra la despoblación
rural».