Se trata de un soporte digital con la historia social de los
madrileños, donde se ordenan las ayudas que perciben los ciudadanos en
educación, vivienda o empleo.
La presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, presentó este
viernes la Tarjeta Social de la Comunidad que facilitará el acceso a las
prestaciones públicas de servicios sociales. Este nuevo soporte permite a los
madrileños acceder a su «mapa personal», es decir, un registro de sus
prestaciones sociales, de forma que tendrán un acceso «más ágil, unificado y
transparente» a sus gestiones, según aseguró la responsable de la región. En
ella se incluye la historia social de los madrileños, donde se ordenan las
ayudas que perciben los ciudadanos en materias como educación, vivienda o
empleo.
Los madrileños ya pueden acceder a su historial a través de
la página web de la Comunidad de Madrid, o bien a través del Certificado
Digital o el sistema nacional de clave permanente.
Cifuentes informó de que «uno de cada tres madrileños» se
benefició el año pasado de las prestaciones procedentes de las consejerías de
la Comunidad y subrayó que este dato da una idea «muy clara de la
transcendencia y alcance de la Tarjeta Social».
Actualmente, la aplicación web cuenta con 49 ayudas que, una
vez dentro de la página, el usuario podrá filtrar por temáticas o el estado de
tramitación, de modo que podrán conocer en tiempo real la situación de la ayuda
solicitada.
La implantación de la Tarjeta Social será «paulatina» y está
previsto que para diciembre se pueda solicitar la tarjeta en su versión física.
Los primeros en pedirla serán las personas dependientes y aquellas que
comiencen su Historial Social y, posteriormente, lo podrán hacer quienes ya
cuentan con prestaciones y ayudas reconocidas en su Historia Social Integrada.
Asimismo, la aplicación de estas medias sociales se apoya en
la Carta de Derechos Sociales que se aprobó en julio pasado, y sirve de «marco
de referencia de las políticas sociales», indicó Cifuentes.
La ex delegada de Gobierno declaró que este dispositivo
supondrá «una transformación sin precedentes en materia de política social y,
por otro lado, un importante avance en la identificación de las necesidades de
las personas y del reconocimiento de sus derechos». «La Tarjeta Social fue uno
de los compromisos que adquirí en el último Debate del Estado de la Región y
supondrá, a partir de su implantación, el reconocimiento de un verdadero
derecho social en la atención», trasladó.